Cómo vallar una vivienda cerca del mar

Vivir cerca del mar tiene sus ventajas, pero también sus inconvenientes.

El mar es sinónimo de corrosión, salitre y humedad en el ambiente, características que hacen sufrir a los materiales de construcción y elevan los presupuestos de mantenimiento cada año.

A la hora de vallar una propiedad, deberás tenerlo en cuenta.

Si este es tu caso, quédate.

Te contamos cómo vallar una vivienda cerca del mar.

Evitar la corrosión y salitre del mar

Si has llegado hasta aquí es porque, posiblemente, dispones de un vallado que sufre cada día la corrosión por la cercanía al mar o, porque vas a iniciar recientemente en breve un proyecto de vallado para una casa de playa.

Debes saber que en el mercado encontraras miles de productos que prometen proteger las vallas metálicas de la corrosión. Sin embargo, no son nada baratos y su efectividad no está 100% asegurada.

Por más imprimaciones de anticorrosivos que hagas sobre rejas y vallado, la humedad del ambiente no desaparecerá y seguirá su curso natural. Además, el producto no es ilimitado y debes realizar múltiples aplicaciones para ver sus efectos. El presupuesto para pintar puede ascender a 1.500 € si solicitas los servicios de un profesional.

En definitiva, no es la mejor opción si tenemos en cuenta que es un mantenimiento anual.

Entonces, … ¿Cómo vallar una vivienda cerca del mar?

Vallas de PVC, la solución para viviendas en la costa

La única solución garantizada es sustituir tu vallado tradicional y con tendencia a la corrosión, por uno de PVC, mucho más resistente y duradero.

El PVC es un material termoplástico (policloruro de vinilo), considerado uno de los derivados plásticos más versátiles. Su elevada resistencia al fuego, impacto y condiciones meteorológicas, hacen que este material sea el más utilizado en construcciones o edificios.

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Ensayos han demostrado que puede llegar a durar 50-70 años sin alterarse, motivo principal por el que se utiliza en tuberías. Además, es muy rentable y no excesivamente pesado. Sin embargo, entre sus características más destacadas, se encuentra su resistencia a la corrosión.

Por todo ello, el PVC podemos encontrarlo en pavimentos, paredes, puertas o ventanas de exteriores, pero también en vallas de jardines o piscinas.

Ventajas de las vallas de PVC para jardines

Además de las ventajas del PVC, los modelos de vallas que encontrarás en HiperVallas suman otras ventajas más a mayores y que, otros sistemas similares de vallado cerca del mar, no tienen:

Vallas de diseño. Podrás elegir entre diferentes modelos y acabados que van desde el blanco imitación madera natural o gris, colores tendencia en decoración.

Entrega en Kit de fácil montaje. Recibirás en tu domicilio el kit completo de montaje cortado a medida y con todo lo necesario para su instalación con un manual de instrucciones. Es muy fácil, rápido y no requiere de manos expertas o herramientas profesionales para su instalación. Pero te podemos facilitar un profesional si lo necesitas

Vallas a medida. No importan cómo sea la forma del perímetro y los desniveles del terreno, recibirás la valla para tu jardín totalmente a medida.

Distancia entre lamas. Podrás personalizar la distancia de separación entre lamas, optando a mayor seguridad con un vallado de ocultación o vallas abiertas con un vallado para delimitar espacios.

Sin mantenimiento. Se acabó pintar, barnizar o aplicar imprimaciones anticorrosivas. Bastará con limpiar la superficie con un paño húmedo para que luzcan como nuevas.

No se arquean con el viento. Su gran resistencia ha demostrado que son las únicas vallas que no se arquean, llegando a soportar hasta rachas de viento de 130 km/h. Podrás colocarlas ancladas al suelo o sobre muro, siendo las más seguras para áticos o terrazas en altura.